El dilema Samsonite

¿Hay algo mejor que una Samsonite dura? así rezaba el anuncio de las, en su  momento, innovadoras Samsonite blandas... ¡pues así me siento yo ahora!, con el dilema en la cabeza. Yo tenía a mis preciosos y duritos bichos del Kinder Zoo, metidos en su huevera, perfectos en su media docena... y así vivía, con la tranquilidad de pensar que eran inmejorables en su concepción.

Hasta que me llegó mi primer encargo navideño. Me pedían los mismos animales, pero en versión blandita, para ser utilizados de llavero.

Pensé: "pero vamos a ver, con lo chulos que son duros, que tienen su boca grande, que puedes guardar chorradas dentro, que encima me pego el atracón a chocolate...", pero, poco a poco, y a medida que los tejía, me iban gustando más y más.

Son igual de cuquis, ¡pero espachurrables!

Aquí ya metidos en su bolsita, listos para abandonar el nido... mis pequeños, snif, snif...

¿y vosotros? ¿kinder zoo duro? ¿o blando?